______________ La voz de los que no tienen voz_____________

Al igual que aquellos hombres que dejaron la oscuridad de la ignorancia queremos que esta investigación sea un arma de conocimiento, cultura y educación para lo jóvenes y la sociedad chilena. Para que se inspiren con el trabajo de hombres que con sólo ganas de marcar la diferencia han logrado pasar a la historia.

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Seguimos en camino

Ya hemos finalizado la primera etapa de nuestra investigación, la cual tenía como principal objetivo, reflejar la historia y lo que fue la Prensa Obrera en repuesta a los problemas de la clase trabajadora del país. Mediante un paso por la historia que hicimos a través de artículos y videos quisimos reflejar un momento que marcó el proceso de estructuración de la prensa que hoy conocemos.
Hoy, han surgido nuevos objetivos y desafíos, los cuales se fueron abriendo paso a medida que avanzábamos en nuestra investigación y nos envolvíamos en el espíritu de lucha y en aquel despertar al conocimiento y la organización para conseguir la tan ansiada justicia social. Ahora lo que pretendemos es:


*Dar a conocer que aún quedan vestigios de lo que fue la Prensa Obrera.

*Demostrar que la Prensa Obrera, ejemplificada hoy en la prensa de gremios y sindicatos, es utilizada con fines informativos y educativos tanto para los trabajadores de la misma institución y para la sociedad.

*Incentivar a las personas a instruirse sobre este tipo de prensa por medio de nuestro blog para que así la sociedad no se pierda en los senderos de la ignorancia y la injusticia y se convierta en personas críticas y defensoras de sus derechos.

domingo, 8 de junio de 2008

Lo que queremos lograr

  • Dar a conocer que este movimiento fue la voz de aquellos que no la tenían, de aquellos que debido al sistema capitalista que imperaba, eran oprimidos y no podían responder a las injusticias cometidas contra ellos.

  • Demostrar que la prensa obrera fue utilizada con fines educativos, para quienes no podían alcanzarla, de organización y lucha. Fueron trazos de esperanza para todos aquellos obreros que cuando ya sentían que sus vidas pendían de un hilo, podían seguir combatiendo. Fue la luz que iluminó la mente del pueblo y encaminarlos a la cultura y la enseñanza y dejarán la oscuridad de la ignorancia

  • Incentivar a la juventud y a quien lea estos artículos a utilizar la razón, el entendimiento y a servirse de los éxitos que la ilustración tuvo en la mente humana y que los que puede llegar a lograr.

sábado, 7 de junio de 2008

Poesía acráta

La plebe
Alejandro Escobar y Carvallo

Cual siniestra legión de cadáveres humanos
de víctimas vengadoras, blandiendo el augusto puñal en sus manos,
pasaban las hordas en busca de nuevas auroras!

Llevaban un rojo sudor en sus pálidas frentes,
y rayos de ira en las torvas pupilas.
Y cual tropa de errantes serpientes
cruzaban las verdes llanuras tranquilas.

Cubierta de harapos roídos...
marchaba la fuerte legión de los bravos.
Era la revancha de los vencidos
al son de la Marsellesa de los esclavos!

Y lanzaban los parias
clamores de niños y aullidos de fiera!
parecían las huestes proletarias
una tribu nómade y guerrera...

Y marchaban hambrientos y descalzos
a la conquista del Bien Común,
a su paso rompiendo cadenas y cadalsos,
como barre el desierto el Simún!...

Al cinto la hoz, y la enorme cuchilla
del arado al hombro...
seguían a marcha forzada los hijos de la villa,
haciendo a su paso escombro
los templos, palacios y muros
de la alta ciudad imperial.

Eran los harapientos, gigantes futuros
que al pie de la Bastilla,
marcando con sangre el camino,
mostraban su trauectoria
como un destino...
a los oscuros
caminantes de la Historia!...


viernes, 6 de junio de 2008

Prensa Anarquista

"Encarnación de la Idea, he germinado ya en Chile en el folleto, en el libro, en el periódico y en la tribuna. He germinado como la simiente arrojada sobre la tierra virgen y fecunda. He despertado conciencias adormecidas por el narcotráfico de los fanatismos y he abierto ojos que hubieran permanecido cerrados. He dado a conocer los males sociales que aquejan al pueblo y he hecho levantar la protesta contra estos males. He paseado por las calles este clamor y he hecho temblar ya la Autoridad que, temerosa de una revelión del pueblo, ha tenido que reducirlo al silencio y a la sumusión con el tronar de los cañones y con la efusión de su sangre a charcos.
De los movimientos populares he hecho la escuela del pueblo y de mis luchadores sus pedagogos.
Es en ellos, en estos movimientos, donde se despierta el pueblo y donde éste abre los ojos; donde se aprende a amar y donde se aprende a odiar."
"Jerminal!!", Jerminal!, Nº1, Santiasko de Chile, marzo 25 de 1904.

jueves, 5 de junio de 2008

El escenario periodístico; "La guerra de palabras"


En los inicios del siglo XX, el escenario social no era muy distinto al escenario periodístico. La Cuestión Social y la lucha de clases irrumpe no sólo en las calles y lugares de trabajo a lo largo de nuestro país, sino que también se plasma con tinta en los periódicos de la élite y en los boletines de la clase asalariada.

La irrupción de la empresa periodística, amparada en el sistema de impresión de vanguardia traída por el Sr. Edwars McClure desde el siempre amigo de la élite chilena País del Norte y sostenida por la publicidad y el capital de sus directivos aristocráticos, es el fiel reflejo del sistema capitalista opresor. Imponente y efectiva se alza por sobre los sostenedores de la llamada Prensa Obrera; los mismos trabajadores, que otorgan parte de su escaso capital como medida de financiamiento. Poseedores de arcaicos métodos de impresión y con fe ciega en sus pedagogos, personajes instruidos como Recabarren y Escobar y Carvallo, que a diferencia de ellos tuvieron la suerte de no ser analfabetos y así poder cumplir una labor pedagógica, de instrucción política y generadora de conciencia de clase. Arma que les permite alzarse contra el sistema que los transformaba en mera mano de obra sin valor alguno, intercambiable como cualquier producto comercial.

La Prensa Obrera, al contrario de la que hemos denominado Prensa Elitista, sí podía entregarse gratuitamente o por un aporte voluntario, ya lo señalaba Luis Emilio Recabarren en uno de sus escritos en “El Proletario”, el 3 de diciembre de 1904: “Trabajadores, proletarios: bastará que cada uno de vosotros dedique 20 centavos semanales para que vuestros dos periódicos tengan mayor campo donde servir vuestros propios intereses.”. Otro ejemplo de cómo se financiaba este tipo de prensa es la de corte anarquista que no poseía publicidad alguna y su entrega era habitualmente gratuita. Estos ejemplos demuestran claramente que el objetivo de la Prensa Obrera no era ser una institución lucrativa, sino ser la “voz de los sin voz” lo que la llevaría a transformarse con el paso de los años en un arma efectiva de lucha, informando los actos represivos y abusivos por parte del gobierno de turno.

Arias Escobedo lo menciona en su libro sobre la Prensa Obrera: “En los periódicos obreros predominan los artículos de análisis, comentarios y narraciones de movimientos sociales y hechos de actualidad; orientaciones doctrinarias, polémicas, denuncias y defensas de organizaciones de trabajadores”

Así podemos conformar el escenario político-social no muy lejano a nuestra sociedad actual: La existencia de tres principales clases; la oligárquica, compuesta por la élite, la naciente clase media, compuesta principalmente por comerciantes y la clase proletaria, compuesta por obreros. Este escenario se traslada al espacio “periodístico”(no podemos hablar de periodismo como tal, porque en la época se asocia más a un oficio que a una profesión) con la existencia de periódicos que vinculados a una prensa de trinchera, de corte Socialista-Marxista, Anarquista y Demócrata (representantes de la clase media) versus una prensa más oficialista y liberal representante de los intereses del gobierno de turno y sus aliados, poseedores de un proyecto político similar; la liberación de los recursos y el progreso material por sobre el bien común.

“La guerra de palabras”, como hemos denominado al enfrentamiento de la Prensa Elitista versus la Prensa Obrera no constituía una gran amenaza al comienzo, pero tomó fuerza con los años, el tiraje aumentó, de ser casi mensual pasó a ser semanal, los periódicos editados pasaron de no más de 2 a cerca de 13 en la época de los 20, dando muestra a la autoridad que en vez de flaquear en la lucha, los trabajadores tomaban más fuerza. Las huelgas eran pan de cada día, el descontento se hacia cada vez más patente y las voces de los obreros retumbaban en cada rincón de las ciudades. Importante es señalar que una de las primeras organizaciones en alzar la voz e irse a huelga fue el gremio de los Tipógrafos en 1902, al cual Recabarren pertenecía.

La revolución había comenzado, y los trabajadores no estimarían en esfuerzos ni en métodos para lograr sus objetivos.

La prensa, en ese entonces y para esa clase ejerció un valor que se le atribuía en sus comienzos por la época de la Ilustración, ser un lazo comunicacional entre esos nuevos ciudadanos que venidos desde el campo para una mejora de condiciones se ven desposeídos, desnudos frente a un mundo que ya no los ve como súbditos de un señor feudal, sino que los ve como un instrumento de generación de dinero, como una masa ignorante y deforme. La prensa obrera, llena ese vacío ante la indolencia de sus dirigentes y de sus políticas de gobierno que lejos de crear un clima de mejoras sólo contribuyen al empobrecimiento material y espiritual, al desamparo sumergiéndolos en los vicios y producto de esto, arrojándolos a la destrucción de sus vidas como personas con integridad y derechos al igual que cualquier ciudadano.

En las palabras de uno de sus representantes, la Prensa Obrera, tiene por misión sagrada, contribuir a la ilustración y difundir la cultura en las costumbres de los pueblos.”

El Periodismo

"La misión de la prensa es difundir la ilustración y la cultura para levantar el espíritu moral del pueblo. Sus columnas deben dedicarse a este fin.
Los periódicos que usan la mentira y lanzan lodo a la virtud deben ser condenados a muerte. No deben leerse.
Los periódicos que se arrastran y ocupan sus columnas con las inmundicias de la corrupción son un baldón para los pueblos.
La virtud se enseña presentándola en toda su hermosura. La corrupción se combate exteriorizando el mérito de la virtud en las páginas del diarismo y no señalando los nombres de los débiles que caen en al vicio.
No debemos abandonar al corrompido, nuestra misión es purificarlo. El hombre tiene el deber de regenerarse y contribuir a la regeneración de los demás.
Este es el programa moral de LA VANGUARDIA."

Luis Emilio Recabarren

martes, 3 de junio de 2008

¿Un periodista más o la voz del pueblo?

Hoy, dentro de nuestra sección que pretende realizar, no una mera biografía sino que una especie de regreso al tiempo, recordando representantes de carácter importante para el movimiento obrero y los ideales que este tenía para promover, el elegido es Recabarren, y no por una especie de elección al azar, sino porque con tan sólo leer unas líneas sobre este personaje nos damos cuenta de todo el valor que tiene su nombre en el desarrollo de la historia obrera en nuestro país. ¿Un periodista más o la voz del pueblo? Bajo esta simple interrogante que a ratos quizás puede tonarse compleja se quiere demostrar lo uno o lo otro. Sea usted, querido lector, libre de establecer el juicio de valor que estime conveniente.

Luis Emilio Recabarren Serrano, hombre nacido en el cerro Playa Ancha de Valparaíso aquel 6 de julio de 1876 bajo el amparo de una familia modesta y numerosa de padres comerciantes.
La escuela Santo Tomás de los curas salesianos de Valparaíso le abrió las puertas, permitiendo de esta forma conocer lo que fueron los primeros 4 años de estudio de este hombre que desde pequeño comenzó a crear las luces para convertirse en una de las grandes promesas de nuestro país. Posteriormente, en el año 1890, a la edad de 14 años su familia se traslada a Santiago en busca de mejores oportunidades laborales, allí es donde comienza a trabajar como aprendiz de tipógrafo para ayudar a solventar los gastos familiares; sus días comenzaban a ser interminables y agotadores.
Al cabo de un par de años, motivado por el deseo de poder contribuir a la lucha de su clase, la obrera; ingresa al partido Demócrata, único partido popular en ese entonces.

En el año 1899 específicamente el 22 de enero, producto de su excesivo compromiso con la clase obrera de nuestro país y ya más vinculado al área periodística, aparece el primer número del periódico “La Democracia” de Santiago, siendo Recabarren uno de los fundadores y redactores. Este hito marca el comienzo de su inagotable actividad como creador y promotor de la prensa obrera en Chile.

Desde 1900 comienzan a llevarse a cabo las formaciones de las primeras organizaciones sindicales en nuestro país llamadas mancomunales (manos comunes), las que eran agrupaciones territoriales, que congregaron a miles de obreros y los guiaron en sus combates de clase, bajo el objetivo de impulsar las luchas reivindicativas. Exactamente en el año 1903, Recabarren es invitado a trabajar en la mancomunal de Tocopilla con la idea de fundar, dirigir y escribir un periódico que plasmara en sí dicha identidad; oferta que es rápidamente aceptada, haciendo que de esta forma el 18 de octubre de ese mismo año apareciera la primera edición de “El Trabajo”, en el que ya, el que comienza a ser conocido como el padre de la prensa obrera escribe en su editorial lo siguiente: “Procuraremos obtener todo lo que aspiramos por la fuerza de la razón, pero si los oídos de las autoridades se quedan sordos, haremos sentir entonces el efecto que produce la razón de la fuerza, sin vacilaciones y al precio que las circunstancias lo requieran". Encargado de dar a conocer palabra a palabra, frase a frase la fuerza característica que se hacia presente como hombre fiel a sus ideales. Hecho que lo lleva a ser reconocido por muchos como la voz del pueblo de Chile y no como un simple periodista de la época. De esta forma Luis Emilio Recabarren Comienza su inmensa labor que será elemento decisivo en la transformación del proletariado chileno de “una clase en sí”, en “una clase para sí”. Es decir, con conciencia de clase, conocedora de su rol histórico y contando con las organizaciones sindicales y políticas para cumplirlo.
Al cabo de unos años cuando la situación de represión en contra de los obreros se hacia más latente, ocurriendo así una serie de atrocidades en contra de ellos, siendo el hecho más impactante cuando en 1907 ingresan a la Escuela Santa María de Iquique, tropas armadas de ametralladoras para así terminar con una poderosa huelga de unos 15 mil trabajadores del salitre de la provincia de Tarapacá y para al mismo tiempo, destruir el movimiento sindical clasista. Lo que trajo consigo la muerte de miles de trabajadores, mujeres y niños. En ese entonces Recabarren se encontraba en Buenos Aires, Argentina producto de un autoexilio para eludir una injusta condena en su contra por escribir en “El Trabajo” y ser dirigente de la Combinación Mancomunal de Obreros de Tocopilla. Este, al saber de la crueldad de dicha catástrofe ocurrida en Iquique, decide escribir una serie de artículos para el periódico del partido Socialista que posteriormente fueron reproducidos en “La voz del obrero” de Taltal, en uno de ellos llama a crear el partido revolucionario de la clase obrera y un poderoso movimiento sindical clasista.

A fines de 1908 llega Recabarren de regreso al país y en septiembre de 1909 es fundada la gran Federación obrera de Chile a la que los trabajadores más avanzados con Recabarren a la cabeza deciden incorporarse para luchar por transformarla en una central clasista, defensora de los intereses de los obreros.
Con gran claridad de que nuestro país necesitaba organizaciones que sean escuelas de educación proletaria, Recabarren se esfuerza en construir las condiciones para fundar el partido revolucionario de los obreros. Uno de los pasos que da es la creación de “El Despertar de los Trabajadores” de Iquique, el más importante de los periódicos por él creado. Su primer número aparece el 16 de enero de 1912. Desde sus páginas plantea la necesidad de ir a la formación de ese partido.

Producto de la 3ra convención de la gran federación obrera de chile que se realizó en 1919 en Concepción en la que se enfrentaban dos posturas sólidas, la de Pablo Marín Pinuer y la de Emilio Recabarren, postura ganadora en esa ocasión, que planteaba la transformación de la federación en una central clasista, revolucionaria, de lucha por la transformación social. Nace la Federación Obrera de Chile, FOCH, primera central clasista de los trabajadores chilenos. Y ello es un importante aporte al desarrollo del movimiento obrero.

En 1920, como resultado de una campaña demagógica en que se utilizaba un lenguaje popular y se tomaban en cuenta los problemas más sentidos de los trabajadores logra ganar a amplios sectores obreros, permitiendo que Arturo Alessandrí sea elegido presidente de la República Chilena, gobierno en el que se cometieron una serie de masacres en contra de los trabajadores, obreros y clase que catalogaban como inferior en nuestro país, olvidando así todo tipo de discursos realizados para la mejora de aquellos que formaban parte del pueblo. Gran cantidad de vidas se perdieron durante ese periodo. Hermanos y compañeros jamás se rindieron ante sus ideales de lucha intensa por la clase obrera, la represión ante el proletariado no hizo más que fortalecerlo haciendo más fuerte a este movimiento. Avalando de forma clara esta afirmación se destaca que en las elecciones parlamentarias de 1921 son elegidos varios parlamentarios obreros, entre ellos el inigualable Recabarren, además la FOCH se fortalece a tal punto en que llega a agrupar a 140 mil asociados. Incluso se crean los primeros sindicatos campesinos.

Más barbaridades ocurrieron con el pasar de los años, mientras gobernaba Alessandrí, para poder debilitar este movimiento. Pero, sin duda, una noticia realmente impactante que revelaba el hecho del suicidio de Luis Emilio Recabarren en el año 1924 causó un quiebre que provocó mucho dolor. Muere la voz del pueblo, el que con frases como:

“La prensa obrera, tiene por misión sagrada contribuir a la ilustración y difundir la cultura en las costumbres de los pueblos.
Un periódico que llegue a manos de un hijo del trabajador, debe ser un libro en el cual encuentre la savia vivificante para fortalecer el espíritu, cuando abatido por las luchas de la vida, se siente adormecer.
Debe llevar en sus caracteres, palabras de enseñanza y de ejemplo, en estilo claro y correcto que revele la buena intención de la pluma que los traza.”

Daba cuenta clara de que no era un simple periodista al que le interesaba de forma intensa la causa obrera sino que era un icono, un modelo a seguir que no hacía más que demostrar en cada escrito que realizaba que él no era el simple hombre que llevaba por nombre Emilio Recabarren sino que el gran padre del movimiento obrero, La voz del pueblo por el que tanto luchó. BlogPrensaObreraChile

lunes, 2 de junio de 2008

La voz de los sin voz


Al hablar de prensa obrera, es común que surjan, muchas interrogantes al respecto. Pero las respuestas a la mayoría de ellas se resumen, en que ésta fue un movimiento formativo, educativo y representativo de los obreros, demócratas, anarquistas, socialistas y comunistas que surgió alrededor de 1880 y se extendió hasta 1930.

Sin embargo, es difícil entender qué es la prensa obrera en profundidad sin antes conocer el escenario histórico en el que se veía envuelto Chile para ese entonces. Nuestro país se enfrentaba a la ya renombrada “Cuestión social (1880-1920)”, período conocido con ese nombre ya que consistió en el permanente enfrentamiento de las clases sociales, específicamente la clase obrera o trabajadora y la clase dirigente. La Nación, se encontraba en un escenario que se muestra indiferente ante las necesidades laborales y de bienestar de los trabajadores. Pobreza extrema y explotación laboral, fueron entre otros, problemas de cada día.

El escenario económico, marcado por un capitalismo totalmente consolidado, llevó al país a la industrialización incipiente, y socialmente hablando a una urbanización descontrolada que empeoró notablemente las condiciones de vida que ya en algunos sectores sociales no eran las mejores. Por último, una clase dirigente que se veía estática ante peticiones obreras y la cual no estaba dispuesta a los cambios que se solicitaban.

Por todo este conjunto de malas organizaciones, nace un movimiento que no soporto más estar en silencio. Los trabajadores alzaron su voz, generándose así organizaciones sindicales y políticas, para crear conciencia entre la Oligarquía y acabar con las malas formas de trabajo y las precarias condiciones de vida. Es justo en este momento cuando sale a la luz una nueva forma de representación, de educación y de formación para los obreros, demócratas, anarquistas, socialistas y comunistas, quiénes en ese tiempo no tenían voz ni voto ante el Estado y la clase dirigente. Este medio fue conocido como La Prensa Obrera.

Lo que pretendían ésta clase de periódicos era, mas allá de comunicar, instruir a la población obrera, informar de los abusos laborales de los que eran victimas, difundir cultura, moralizar, crear conciencia y un medio que fuera vocero de la clase baja con el cual se sintieran representados.

Este movimiento periodístico no era interesado. Su fin no era el lucro, por lo tanto muy pocas veces en sus páginas había propaganda, motivo por el cual, parte de la empresa periodística de la época, establecía que ésta no podía ser prensa, si no publicaba propagandas de corte político o económico. Quiénes trabajaban en este tipo de periódicos, lo hacían sólo por política propia, ya que no recibían ningún tipo de remuneración. Fue más bien, un servicio más de parte de los periodistas de ese tiempo a la población más vulnerable, motivados por las ganas de querer hacer llegar a la gente apoyo moral y espíritu de lucha por sus derechos y ante el sistema que imperaba.

Los mayores representantes de este movimiento letrado fueron Luís Emilio Recabarren y Alejandro Escobar y Carvallo.

domingo, 1 de junio de 2008

Fotovideo, La voz del pueblo Chileno



A través de este compilado de imágenes, con la canción de Víctor Jara dedicada a Luis Emilio Recabarren (Padre del movimiento obrero), se pretende dejar constancia de la imponente fuerza de la voz obrera en nuestro país.